A veces se me sale el generalizar en masculino y ni me doy cuenta, cuando me doy cuenta intento trabajarlo, pero sin culparme por cada vez que no lo logro, por Bárbara Aguiar

Hace un tiempo (bastante en realidad) leí en Facebook que una persona comentaba la corrección de un trabajo donde su docente a cargo señaló que el constante uso del “los y las” “trabajadores y trabajadoras” era muy “cansador” a la lectura y que a pesar de que entendía la intensión de visibilizar a las mujeres su relato a la larga era agotador… resulta que a mujeres y personas no binarias se nos ha omitido e incluso borrado sistemáticamente de diversos espacios y cuando empezamos a visibilizarnos con el uso de palabras como “las” o “les” ¿dicen que cansa? Realmente no entiendo, ni me importa que tanto pueda agotar al leer o escuchar lenguaje no binario y/o no masculino, considerando que en realidad la “O” no es neutra como nos intentan hacer creer o más bien como intentan imponerlo. Se podría decir que las palabras epicenas solucionan esto, personalmente me acomoda y me gusta bastante usar este tipo de palabras, las considero una gran alternativa e intento emplearlas para hablar...